“No tengan miedo. Anímense, no tengan miedo”, con estas palabras del papa Francisco concluía la homilía de la misa de envío de la Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Lisboa Portugal del 1 al 6 de agosto y en la cual un grupo de jóvenes de nuestra comunidad universitaria participaron de manera festiva, alegre y con fe.

Con el alma llena de gozo, un millón y medio de jóvenes de todo el mundo participaron en este evento convocada cada 4 años por el papa y donde los jóvenes de todo el mundo pueden acercarse a su fe y vivir una experiencia significativa que los anima a renovar la vida y seguir alentando su compromiso como seguidores de Jesús.

Nuestros jóvenes pudieron compartir momentos de encuentro, oración y reflexión, compartiendo sus experiencias de fe y construyendo lazos de amistad que trascienden fronteras y culturas, durante la pre jornada celebrada en la ciudad de Elvas y posteriormente en la jornada en Lisboa con otros jóvenes de distintas partes del mundo y de distintas congregaciones.

También durante la jornada mundial pudimos participar en el Calasanz Day que se llevó a cabo en Lisboa y reunió a escolapios de todo el mundo con el padre general Pedro Aguado.

Algunos de nuestros jóvenes participantes nos cuentan su experiencia.

Daniela Torres (Ingeniería Industrial):

“Al ser mi primera vez en una jornada mundial, me llevo una experiencia inigualable, yo al no estar tan metida en el tema de la iglesia puedo decir que valió la pena haber hecho tantos esfuerzos para Dios, el conocer gente y diferentes culturas”.

Elisa Hemkes (Ingeniería Industrial):

“Para mí, ir a la JMJ en Lisboa, Portugal fue una experiencia llena de emociones, un poco cansada, pero a la vez una experiencia que me permitió fortalecer mi fe. Es muy emotivo y muy motivador ver a tantos jóvenes de todo el mundo en este tipo de eventos, recibiendo los mensajes que tanto el Papa como otras personas nos dan. Es una experiencia increíble que cada vez es diferente pero que siempre me dejará una nueva enseñanza”.

Pamela Lule (alumna de Diseño Gráfico y Producción Digital):

“La experiencia que tuve si es algo que personalmente me marco por el hecho de que apenas estoy regresando a mi fe y haber hecho actividades relacionadas antes en la pastoral, hizo que tuviera mucha emoción por ir, además poder asistir a una actividad de tal magnitud marca mucho a una persona, y lo que más me gusta hacer desde que llegue es contar mi experiencia de haber ido a la JMJ”.

Alessandra Rosas (Arquitectura):

“La JMJ es de esas experiencias que te cambian la vida. Hay algo extraordinario de estar rodeado de gente como tú y sentir que por lo que estás luchando en el mundo, no estás solo. Te abre los ojos sobre otra perspectiva sobre el servir y sobre ti como peregrino en la vida. ¡Vale todo el cansancio que cuesta!!”.

Fredy Crivelli (egresado de Administración y Dirección de Empresas):

“La JMJ es un mundial religioso. Es impresionante como jóvenes de todo el mundo viajan por Dios. La experiencia te da una nueva visión y mentalidad, además que descubres que en todo el mundo hay gente con los mismos valores y pensamientos que tú”.

Melanie Albarrán (alumna de Actuaría):

“La JMJ no solo fue un viaje a otro país, no solo significó conocer al papa Francisco, ni caminar kilómetros día a día, para mí fue más que un sueño cumplido, significó un encuentro y al mismo tiempo un reencuentro con mi fe, fue una oportunidad de compartir con jóvenes de todo el mundo la energía de ser una juventud de cambio. Lograr vivir una JMJ implica sacrificio, esfuerzo, trabajo, y esperanza, pero al final sin duda valoras el gran regalo de Dios que te llena de energía positiva, y de inspiración para compartir su palabra”.

Ana Martha Hemkes (Mercados y Negocios Internacionales):

“Fue increíble encontrarme con tantos jóvenes de diferentes países y culturas que estuviéramos ahí presentes por una misma creencia y fe que nos mueve que es Dios”.

Ana Rosa Varela (egresada de Diseño Gráfico):

“La Jornada Mundial de la Juventud en Lisboa ha dejado una huella imborrable en los corazones de todos los participantes, siendo una experiencia transformadora que impulsa a los jóvenes a continuar trabajando por un mundo más justo”.

Martha Domínguez (egresada de Ciencias de la comunicación):

“La JMJ 2023 representó para mí, un espacio de sanación personal de un proceso que venía trabajando desde la jornada pasada; así mismo significó un RETO de vivir esta experiencia completa, en familia y con mis limitaciones físicas. El ver a tanta gente diferente, movidos todos por la fe al impulso del Espíritu Santo y asimilar que fui parte de un magno evento, al que todos fuimos LLAMADOS a vivirlo, ha hecho que mi esperanza crezca y me motive a renovar mi caminar hacia Jesús y fortalecer mi testimonio, una experiencia inolvidable”.

El papa Francisco reflexionaba en la eucaristía de despedida de la jornada: “Es hermoso lo que estamos experimentando con Jesús, lo que hemos vivido juntos, y es hermoso cómo hemos rezado, y con tanta alegría de corazón. Y entonces nos podemos preguntar: ¿qué nos llevamos con nosotros volviendo a la vida cotidiana? Quisiera responder a este interrogante con tres verbos, siguiendo el Evangelio que hemos escuchado. ¿Qué nos llevamos? Resplandecer, escuchar y no tener miedo“.

Al concluir la celebración y antes de que los jóvenes comenzaran su viaje de regreso a casa, el papa Francisco anunció dos eventos importantes: el Jubileo de los Jóvenes en Roma, en 2025, y la próxima Jornada Mundial de la Juventus en Seúl, en 2027.

¡Calasanz nos une!
Roberto Rosas
Centro de Pastoral
Octubre de 2023